domingo, 17 de junio de 2007

Thanks for reading

Caesar Antonius, ego baptizo te in nomine Patris et Filii et Spiritus Sancti… Con estas palabras, o quizás con otras en castellano ya, mis padres me iniciaron en la religión cristiana y católica. Como tal fui educado y debo decir que no es una religión que me disguste, aunque no soy practicante. Como todas, ha cometido errores y lo que es peor, horrores también. Pero no me voy a meter a juzgar la religión católica, al menos en este post.
Simplemente me asaltan últimamente las dudas, porque me parece que estoy empezando a creer más en las religiones budistas, que evitan matar cualquier clase de animal porque creen en la reencarnación de las almas, tanto en animales como en otras personas.
Pues yo también empiezo a creer en vidas pasadas, por muchos motivos, pero en especial por el cariño que están expresando hacia mí conocidos, familia o al menos gente que considero como mi familia, colegas, amigos que más que amigos son hermanos, y amigos que más que hermanos son mi otro yo.
Cuando hace unos días empecé a escribir este blog, surgió por una necesidad de sacar de dentro de mi una serie de sentimientos que necesitaba poder expresar en palabras, burdas palabras. De igual manera que mucha gente realiza listas de pros y contras sobre las decisiones a tomar, yo hago terapia ordenando sentimientos, ideas, pasiones y frustraciones a través de textos.
Jamás escribí, ni escribiré en un futuro con el ánimo de que la gente me lea, pero la cantidad de comentarios positivos, dejados en el blog por vosotros, o expresados de palabra, me ha sobrepasado. Nunca esperé ese nivel de aceptación, hasta el punto de que gente que me conoce tan bien, como Guillo, que como he dicho, es como mi otro yo, me ha llegado a decir que gracias a este blog, ha comenzado a conocerme de otro modo. Y este es solo el último de los cientos de gratificantes comentarios y eso me hace pensar en lo dichoso, en lo afortunado que soy de tener tanta gente a mi alrededor que me quiere y me aprecia. Por eso entiendo que he debido hacer algo bueno en alguna de mis vidas pasadas, que me ha acarreado tener tanta suerte en esta vida con amigos como vosotros.
Y es una suerte que gracias a este planteamiento me haya podido, o me haya querido demostrar a mi mismo la existencia de la transmigración de las almas, porque de verdad, me van a hacer falta muchas vidas para agradecer lo que estoy recibiendo.
Mi amigo Lalo, otro de mis yos, pero más lejano por distancia, acaba siempre sus post con un “Thanks for reading” Yo debería acabar todos los míos, parafraseando a Loquillo “He tenido suerte de llegaros a conocer”
Gracias a todos y a todas. Por vosotros, la vida merece ser vivida, merece ser contada.