lunes, 29 de octubre de 2007

Sentirse desconocido

¿Abuelo, has visto ya la capilla para hacer las fiestas?
Con esta frase, aparentemente incongruente para cualquier oyente, comenzó mi enésimo evento de AEGEE, el Network Meeting.
Todo sucedió en Solórzano, organizado por AEGEE Santander, nueva en estas lides, pero que demostró una tremenda profesionalidad en la organización, y niveles épicos de locura, al proponer transformar una capilla en un karaoke discotequero. Con una propuesta como esa, desde luego el éxito de la fiesta estaba asegurado, a pesar de que se te cruce un conserje con ganas de dormir y bastante mala leche, a pesar de la gélida noche cantabra.
Debo reconocer que me sentía extraño, al no conocer a la mayoría de los 70 que alli nos reunimos para trabajar, conferenciar, y por supuesto, festejar
Sentirse desconocido, o más bien poco conocido, en un evento como el otrora llamado Regional Meeting, y actualmente denominado, no se sabe bien porqué Network Meeting es una sensación que, por un lado es dolorosa en el ego, porque no en balde llevo ya no pocos años dando mucho por AEGEE, pero también, y sobre todo, esperanzadora.
Esperanzadora por ver nacer nuevas sedes, esperanzadora, por ver surgir ideas de nuevos eventos, esperanzadora por ver evolucionar una región de Europa con nuevos contactos, que estoy seguro será nuevas sedes en poco tiempo.
Es muy ilusionante ver nacer amistades y relaciones, es ilusionante ver crecer los lazos entre sedes, es ilusionante crear nuevos viejos grupos, como el “Viejas Glorias WG” que nos constituimos en el bar de Solórzano, y al cual ya aspiran llegar algunos, ilusionante ver que, no contentos con crear sedes en reales, intentamos crear ficticias y decidimos crear AEGEE Ovión, solo para encontrar una excusa y reunirnos Oviedo y León y entregarnos una bandera que compartiremos.
Es emocionante ver las nuevas metódicas en las charlas, descubrir como explicar a la gente que no somos una secta gracias al Gran Maestre Juan o como poner en palabras lo que tantas veces viví en estos 8 años y que es cómo sobrevivir en AEGEE sin saber ingles, obra del genial maestro Oscar.
Es emocionante ver la firma de la convención de adhesión de una nueva antenna, quizás no tan impresionante como verla en un Agora, pero infinitamente más emotiva, incluso para una persona como yo que, a priori, era totalmente opuesto a esta innovación, pero cómo no emocionarse al oír el improvisado discurso de Sara, con la voz tomada por la emoción y lagrimas asomando en los ojos, agradeciendo a tanta gente que le apoyaron en este largo camino. También a mi se me saltaron las lagrimas, aunque poco o nada tuve que ver en ese camino.
Por eso, desde aquí quiero dar las gracias a los chicos de Alicante, Brescia, Castelló, Coruña, Kaiserlaurten, León, Madrid, Oviedo, Oxford, Porto, Valencia, y Zaragoza, a la Netcom, a Anna del CD y muy especialmente a Sara, por darme un poquito más de vida y por recordarme, una vez más porqué merece la pena seguir aquí, y porque continuare al pie del cañón,… hasta que se haga un Agora en Oviedo!!!!